Un día que estaba el sol brillando,
Iba yo por el campo patinando.
Pasó a mi lado una
mariposa violeta,
Volaba bajito la muy
coqueta.
Muy sigilosa yo la seguí
Hasta que se posó frente a mí.
Se quedó allí la presumida
Mientras yo la miraba entretenida.
Parecía hecha de papel ligero,
Como el ala de un sombrero.
Me fijé en su lindo color
Para luego poder dibujarlo mejor.
Después de un rato se fue volando
Y hasta hoy la sigo buscando.
En el aire era aún más hermosa
Ella lo sabía la presuntuosa.
Nunca más la vi pero la dibujé
Brillante y divertida. Me encantó. (te he conocido a través de Teresa Sanchez, por el premio, ¡Enhorabuena!) Un saludo :)
ResponderEliminarQue complicado es ver ya una mariposa de color, y más de ese color, pero el poema te ha quedado genial, y el dibujo, ni te cuento, me fascina.
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